Miércoles 4 de Marzo de 2015, 09:58

"Irán bombardeó la Embajada de Israel en Buenos Air

| El primer ministro de Israel denunciará el acuerdo sobre el programa nuclear iraní. Benjamin Netanyahu, en su mensaje en el Congreso de los Estados Unidos, responsabilizó a Hezbollah, que responde al régimen iraní, por bombardear la Embajada de Israel en Buenos Aires.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió ante el Congreso de Estados Unidos que un acuerdo nuclear con Irán garantizaría que el país pueda construir una bomba atómica, a la vez que lamentó la controversia que ha generado su discurso con el gobierno de Barack Obama. Las ambiciones de Irán son una amenaza existencial no sólo para Israel, sino para el mundo entero, advirtió Netanyahu hablando ante las dos Cámaras del Congreso. "Debemos estar unidos para frenar la marcha iraní de conquista, represión y terror", dijo el mandatario, que se mostró en contra del acuerdo que actualmente negocia Teherán con los cinco países del Consejo de Seguridad de la ONU y Alemania. Dicho acuerdo "no bloquea el camino de Irán hacia la bomba, allana el camino de Irán hacia la bomba", alertó. "Es un mal acuerdo. Un muy mal acuerdo. Estamos mejor sin él". Aun así, Netanyahu no cree que la única alternativa a una solución negociada sea una guerra. "La alternativa a un mal acuerdo es un acuerdo mucho mejor", alegó, sin dar detalles de cómo podría ser dicho acuerdo. Estados Unidos, Reino Unido, China, Francia, Rusia y Alemania negocian con Irán para que frene su enriquecimiento de uranio y otras partes de su programa nuclear, a cambio de poner fin a las sanciones económicas sobre Teherán. Para Netanyahu es un error confiar en el país de los Ayatolás, pues considera que "el régimen iraní es tan radical como siempre". "La mayor amenaza para nuestro mundo es una unión del islam con las armas nucleares", afirmó. "Irán asesinó a muchos soldados estadounidenses en Beirut, Irán bombardeó la embajada israelí en Buenos Aires, Irán está ocupado comiéndose naciones. Todos debemos detener la marcha de conquista de Irán. Hace persecución de cristianos, ejecuta periodistas...", expresó el líder político israelí, Seguidamente aseguró que no puede dejar de insistir a los líderes mundiales para que no repitan los errores del pasado, en referencia al Holocausto. Según Netanyahu, ofrecer a Irán la posibilidad de volver a enriquecer uranio al final del acuerdo propuesto, mientras se levantan las sanciones, permitiría a Teherán "disfrutar lo mejor de ambos mundos: agresión en el extranjero y prosperidad en casa". Además, el acuerdo que se está negociando podría desatar una carrera armamentística nuclear en la región más peligrosa del mundo: "No será un adiós a las armas, sino un adiós al control de armas". El líder israelí acusó además a Irán de dominar ya a los gobiernos de Irak, Siria, Líbano y Yemen. "Seguramente seguirán más", advirtió. "Mientras muchos esperan que Irán se una a la comunidad de naciones, Irán está ocupado devorando a las naciones". Por otro lado, Netanyahu lamentó que su discurso ante el Congreso estadounidense haya generado una disputa con el gobierno de Obama. El primer ministro fue invitado por el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, sin que este lo consultara previamente con la Casa Blanca. "Lamento profundamente que algunos consideren como algo político mi presencia aquí. Nunca fue mi intención", dijo el mandatario durante su discurso ante ambas Cámaras del Congreso. Netanyahu aseguró que su intervención ante "el órgano legislativo más importante del mundo" solo tenía como objetivo alertar sobre el peligro de un Irán con armas atómicas. A continuación, elogió al Presidente Barack Obama por su apoyo a Israel y aseguró que aunque muchos de sus gestos por el pueblo israelí son conocidos, otros muchos "nunca se sabrán". "Apreciamos todo lo que ha hecho el Presidente Obama por Israel, mucho de lo cual es ampliamente conocido. (...) Pero algunas cosas que ha hecho por Israel nunca se sabrán por tratarse de asuntos delicados", explicó. Decenas de demócratas boicotearon el discurso del primer ministro israelí, pero aun así cientos de invitados llenaron la Cámara de Representantes. A su llegada Netanyahu fue recibido con una larga ovación por los congresistas y muchos intentaron darle la mano mientras avanzaba hacia el estrado. Esta es la tercera vez que Netanyahu habla ante el Congreso estadounidense, una cifra sólo igualada por el británico Winston Churchill.