Es muy complicada la situación financiera de la provincia

El funcionario admitió que “el problema de la deuda que tiene la provincia es que se trata de vencimientos muy importantes que operan este año y el año próximo”. En ese sentido reconoció que “la salida es la posibilidad de acceder a crédito externo” y reprogramar la deuda “a 10 ó 12 años”. El funcionario habló con Radio Franca, que reprodujo El Entre Ríos. Aunque no lo mencionó, la provincia acumula $13.000 millones de deuda consolidada y otros $4000 millones de deuda flotante. Con ese panorama, administran a cuentagotas los ingresos y egresos de las comprometidas finanzas provinciales. “Entre Ríos no escapa a la realidad de la mayoría de las provincias”, esbozó el ministro. “Del 1 de enero al 31 de agosto, si comparamos 2016 con 2015, los recursos subieron un 29 por ciento y los gastos un 44 por ciento. Esto es lo que lleva a que la situación financiera sea compleja y por eso todos los meses estamos mirando la caja todos los días para cumplir con los compromisos”. La situación la atribuyó a que “el crecimiento de los recursos está muy por debajo de los costos de la inflación. Al gobierno nacional le pasa exactamente lo mismo”. En este panorama, asintió que se demanda tomar crédito externo para financiar el gasto, y contó: “El gobierno nacional nos está acompañando en esto, pero hoy está pendiente la autorización”. Respecto del monto a tomar, recordó que el límite fijado por la Legislatura fue de “hasta 750 millones de dólares, es el monto máximo. Pero la idea es tomar un bono de 450 millones de dólares, ampliable hasta 750 millones”. Sobre los plazos, detalló: “estamos previendo un título con amortización de 10 a 12 años, con un periodo de gracia de 4 años para el pago del capital. Los intereses vencen semestralmente; eso es lo que habitualmente está ofertando el mercado. El Gobernador ya tomó la decisión que el 16 por ciento de ese endeudamiento se vuelque a los Municipios, en las mismas condiciones que la Provincia lo tome. El destino será obra pública y equipamiento. Y se va a distribuir en los municipios en base al índice de coparticipación, sin importar el color político del intendente”. Consideró que con esos números “va a haber un cambio sustancial en lo financiero. Pero el gran desafío sigue siendo el mismo, que es llegar a un déficit cero, salir del déficit estructural que tiene la provincia”. Además, Ballay apuntó que si bien el Presupuesto 2016 estipulaba un déficit de $1000 millones para este año, “en perspectiva, hoy la tendencia es que ese déficit va a ser mayor. Uno de los temas puntuales es el déficit de la Caja Previsional. El principal déficit, que es casi 90 por ciento del déficit provincial, es de la Caja de Previsión. Y estimamos que para este año el déficit va a ser de $2700 millones” además del 10 por ciento restante, que “serían $3000 millones”. Más allá de esos números, afirmó que “el stock de deuda total es el más bajo que tuvo la provincia, porque si lo relacionamos con los recursos es el 50 por ciento del Presupuesto. Esa es la parte buena de la noticia, pero ese 50 por ciento de deuda tiene vencimiento este año y el año que viene. Y ese es uno de los temas pesados que se transfiere en lo financiero”. Sobre las críticas de los legisladores de Cambiemos, Ballay destacó que “en su mayoría, consultan, vienen, porque las puertas del Ministerio están abiertas. Otros eligen la prensa para tirar grandes títulos. Me gustaría que los legisladores de Cambiemos vengan con una propuesta mejoradora, con una propuesta para analizar el destino de los gastos”. Respecto de cuáles serán las pautas presupuestarias para 2017, adelantó: “Las pautas del Presupuesto nacional hablan de un 17 por ciento de inflación, un tipo de cambio promedio de 18 pesos por dólar y un crecimiento de un 3,5 por ciento. Esos son los parámetros del gobierno nacional, nosotros difícilmente nos apartemos de eso”.