Sábado 2 de Marzo, 01:11

Milei informó al Congreso como recibió el gobierno

Política | El Presidente Javier Milei, En su discurso de apertura de sesiones ordinarias en el Congreso, contó en detalle la situación en la que encontró el gobierno,


"En el día de hoy se cumplen exactamente 82 días desde que asumimos el desafío de conducir la nación en lo que es posiblemente el momento económico más crítico de su historia. Luego de más de 100 años de insistir con un modelo empobrecedor y habiendo olvidado casi por completo las ideas que hicieron grande en nuestro país, los últimos 20 años han sido particularmente un desastre económico, una orgía de gasto público, emisión descontrolada que tuvo como resultado la peor herencia que ningún gobierno en la historia Argentina haya recibido jamás", comenzó diciendo el Presidente.

"De hecho los déficits gemelos que heredamos alcanzaron los 17 puntos porcentuales del PBI, muchos de los datos económicos de la herencia que recibimos son públicos desde el día 1 en que tomamos el mando del país: cinco puntos de producto de déficit fiscal en el tesoro y 10 puntos de déficit fiscal generado por el Banco Central, sumando un total de 15 puntos de déficit consolidado; una deuda descomunal con importadores y organismos multilaterales de crédito que nos dejaban al borde del default; reservas netas negativas en el Banco Central por 11,200 millones de dólares; precios de energía y transporte reprimidos en algunos casos hasta un quinto de su valor real y el dólar con una brecha del 200% entre el oficial y el Paralelo; una emisión desenfrenada en los últimos años de gobierno por 13 puntos del PBI, sumados a los más de 15 puntos del PBI que se habían emitido", precisó Javier Milei.

"Durante los primeros tres años de gobierno a su vez durante la primera semana de diciembre la inflación minorista corría un ritmo del 3700 por ciento anual durante la segunda se aceleró al 7500% anual. Mientras que para aquellos que consideran que estos números son una fantasía la inflación del 52% mensual en mayorista implicaba una inflación anual del 17,000%", dijo.

Según Milei los números "que cuadraban de modo perfecto con el sobrante monetario y el potencial de emisión derivado de los pasivos remunerados del BCRA. Entiendo que algunos políticos suman con dificultad, salvo que se trate de la propia. Por lo que pedirles que computen una función de crecimiento geométrico es un oxímoron para aquellos que no la han visto, no la ven y no la verán."

"Nada de todo esto es nuevo", exclamó. "Sin embargo, el desastre no termina ahí, en la medida que auditamos la administración pública nacional y se van metalizando algunos síntomas rezagados del caos económico que nos dejaron, vamos conociendo en mayor profundidad el tamaño de la crisis que heredamos. Una crisis que está presente en todas las dimensiones de la vida de la sociedad. Tal vez el indicador más descarnado de la herencia que hemos recibido lo conocimos recientemente al haberse hecho público el dato de que cerca el 60% de los argentinos se encuentran por debajo de la línea de pobreza", indicó.

Sin embargo -según Milei- "para algunos pareciera que la pobreza apareció de un día para el otro. Les comento que el salario real resulta de la productividad marginal del trabajo y que la misma viene dada por la acumulación del capital. Por eso la tan mentada frase de combatiendo al capital atenta contra la inversión, reduce el stock de capital por habitante y como consecuencia de ellos los salarios reales".

"Esta locura la que nos ha llevado el populismo ha hecho que el salario promedio en dólares al tipo de cambio paralelo -porque el precio es al que hay- sea de $300 cuando la década de los 90 había llegado a los 1800 dólares, en moneda de hoy serían $3000. Esto es el populismo nos quitó el 90% de nuestros ingresos, llegando a un nivel de locura tal donde un tercio de los trabajadores formales son pobres", exclamó.

"Esto es un dato desgarrador que revela crudamente la brutalidad de la herencia que hemos recibido y los estragos que ha producido el famoso modelo del estado presente. De ser el país más rico del mundo cuando abrazamos las idead de la libertad a ser un país donde seis de cada diez argentinos son pobres, mientras la mayoría de los políticos como muchos de ustedes son ricos. A esta tragedia de la pobreza que se ha multiplicado por 10 en los últimos 50 años se le suman como problemas adicionales deudas sociales y problemas profundos en todas las dimensiones de la vida argentina. Una sociedad con cifras récord de indigencia y que al mismo tiempo nunca en su historia repartió tanta asistencia social como ahora. Donde buena parte es asistencia funciona como botín de guerra para organizaciones de izquierda que le roban la plata a quienes dicen defender y atenta contra aquellos que la producen", dijo con tono enérgico.

"Una sociedad con un mercado laboral donde el sector privado formal se encuentra congelado, que producto de la rigidez y sus altos costos laborales hace 12 años no produce un solo puesto de trabajo nuevo, mientras el empleo público y el trabajo informal son lo único que crecen. Y como si fuera poco un sistema previsional quebrado que cuenta cada día en menos ingresos en proporción a sus gastos y que en los últimos 10 años incorporó casi cuatro millones de beneficiarios sin aportes a través de moratorias que son una afrenta moral para todos aquellos que durante toda su vida cumplieron con su responsabilidad", apuntó.

"Los jubilados, víctimas de esta herencia continúa atados a una fórmula que quisimos cambiar porque pulveriza sus ingresos en un régimen de alta inflación a causa del gobierno pasado, y que si no fuera por la recomposición discrecional de los bonos que estamos llevando adelante hubiera redundado en una pérdida de hasta 40% de su poder adquisitivo. De hecho el uso recurrente de bonos compensatorios es una clara muestra de lo mal diseñada que está la fórmula y que la misma requiere ser modificada de manera urgente de modo tal que los jubilados no sean víctimas de los desaguisados de la política", remarcó.

En materia de seguridad dijo: "nos encontramos con una sociedad abandonada a su suerte, ciudades enteras reales del narcotráfico, las calles tomadas por el cabo y el desorden. Ambos generados por las organizaciones de izquierda en su afán de extorsionar constantemente a los distintos gobiernos, un caos que la política alimentó durante los últimos 20 años para beneficio propio. Frente a ellos una fuerzas de seguridad maltratadas y pisoteadas por los gobiernos anteriores que los ataron de manos y les impidieron cumplir con su trabajo, poniéndose del lado de los delincuentes. Ejemplificado en el absurdo de soltar presos durante la pandemia".

Y en lo que respecta a la educación "una crisis que ya arrastra décadas que es cada vez más profunda y que ha redundado en que hoy la mitad de los chicos de tercer grado no entiende que leen en Argentina y el 70% no puede resolver un problema de matemática básica. Esta es la realidad actual del país con más premios Nobel de la región, que supo ser en su pasado un faro de calidad educativa".

"El analfabetismo incipiente es a nuestra educación lo que la inflación es a nuestra economía. En el plano de la educación superior la creación de universidades se ha convertido en un negocio más de la política y en los profesorados e institutos de formación docente proliferan currículas educativas de izquierda, abiertamente anticapitalistas y antiliberales en un país en el cual lo que se necesita en más capitalismo y más libertad", enfatizó.

Pero también dio "números en rojo" en materia de salud, "un sistema empujado hacia una crisis de desabastecimiento causada por la política comercial irresponsable del gobierno anterior que dejó a médicos pacientes y familias sin stock de insumos médicos de todo tipo y en particular de medicamentos especiales como los oncológicos. Todo esto en el medio de la farsa el estado te cuida durante la pandemia, donde si hubiéramos hecho las cosas como un país mediocre hubiéramos tenido 30.000 muertos de verdad, mientras que tuvimos 130,000 con el dolor enorme que eso significa".

"Nos vendieron la idea de que el Estado trabaja como un seguro, pero en la vida real, cuando el siniestro ocurre, defaultea. En términos técnicos, eso ocurre cuando se roban la prima, tal como se puede inferir de un Estado que todo lo hace muy mal", apuntó.

En el plano de la Defensa "heredamos un ejército desfinanciado y hasta desprestigiado por el propio Estado, sin los recursos ni la preparación para hacer frente a los desafíos de un mundo en constante cambio y cada vez más alejado de la Paz. Como si fuera poco, esta debacle nacional nos está llevando cada vez más a la irrelevancia en el concierto de las naciones; volviéndonos incapaces de proteger nuestro propio territorio y obligándolos a arrastrarnos ante los países más cuestionados del mundo. Esta es la realidad que nos dejaron a nosotros que somos por derecho e historia uno de los países más importantes del mundo. Un país que hace 120 años tenía uno de los tres PBI per cápita más alto del mundo y recibía inmigrante de todos los confines del planeta".

Para Milei detrás de todos estos males "nos encontramos con un Estado nacional inoperante, quebrado y que no puede ni siquiera cumplir con sus funciones básicas. Un Estado que hace todo y todo lo hace mal, generando perjuicio en cada aspecto de la vida social en que se entromete. Tal como señalara Milton Friedman, nada bueno del estado se puede esperar".

Según Milei "el padre el monetarismo" existen cuatro formas de gastar y detalló: "uno puede gastar el dinero propio en uno o en terceros, mientras que lo mismo se puede hacer con el dinero de otros. Así la mejor manera de gastar es el dinero propio en uno mismo, ya que uno sabe lo que quiere y cuánto le costó ganarlo. Es decir se maximiza el beneficio. Por otra parte, cuando se gasta el dinero propio en otras personas se minimiza el costo, mientras que cuando se gasta el dinero de otros en uno mismo se cae en el despilfarro. Por ende, esto se deriva que no hay forma peor de gastar que gastar el dinero de otros en otros. Justamente lo que hace el Estado. Es por ello que a mayor Estado presente, mayor despilfarro y menor bienestar para los argentinos de bien".

Luego indicó que el informe de situación de las 114 dependencias de la Administración Pública Nacional realizado por la SIGEN y la Secretaría de Transformación del Estado ha arrojado "información alarmante", entre las que destacó "una deuda consolidada de cerca de 3.000 millones de dólares en bienes y servicios impagos. Un Estado que no solo no controla sino que lo que controla, lo controla mal. Diseñado no para cumplir sus funciones básicas, sino para generar un kiosco en cada lugar donde sea posible para beneficio del burócrata de turno".

"Tal vez el caso de los seguros que hemos visto recientemente los medios sea el mejor ejemplo de esto. Un sistema diseñado para generar un intermediario entre los distintos organismos del Estado de manera de poder cobrar retornos de cada operación. Un sistema corrupto que ha generado cientos de millones de dólares de retorno que terminaron en los bolsillos de los políticos. Es esa tal vez la mejor definición que podemos dar de la situación en la que hemos encontrado el estado: una organización criminal, diseñada para que en cada permiso, en cada regulación, en cada trámite y en cada operación haya una coima para el político de turno", dijo Milei.

"Este esquema putrefacto está extendido a todos los poderes del Estado: tanto el Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo y el Poder Judicial; y en todos sus niveles, nacional, provincial y municipal. Sustentados por medio de comunicación que viven de la pauta oficial y formadores de opinión ensobrados que miran para el otro lado o que eligen cuidadosamente a quien acusar y a quién no. Sustentado también por empresarios prebendarios que apoyan este modelo porque el retorno de pagar una coima es más tentador que el desafío de competir en el mercado. También por sindicalistas que entregan a sus trabajadores, engañándolos con supuestos beneficios mientras promueven un régimen laboral que solo los beneficia a ellos. Es decir, un sistema en absoluta bancarrota moral e intrínsecamente injusto", remarcó.

Y adem ás agregó: "un sistema que solo puede generar pobres y a costa de ellos produce una casta privilegiada que vive como si fueran Monarcas, que llega absurdos obscenos de impunidad como por ejemplo el que vivimos esta semana cuando nos enteramos de que un ex gobernador metió tras las rejas sin debido proceso a un ciudadano por 50 días, meramente por el crimen de hablar mal de la corona en un chat privado. Ofende el silencio de aquellos que se dicen republicanos".

"Por si no se escuchó por los aplausos: ofende el silencio de aquellos que se dicen republicanos. Tras haber visto con mis propios ojos y en detalle la vulgaridad del despilfarro con el que la política se acostumbró a vivir, ratifico una vez más que no se trata de impericia. Que un sistema que haga tanto daño a tanta gente no es casualidad el desastre en lo que nos han sumergido. Se trata de un esquema consciente y planificado se trata de lo que yo llamo el modelo de la casta".

"Es que hay una relación íntima entre los privilegios de la política y el malestar del común de los argentinos. Es precisamente el modelo económico del Estado presente, un régimen de gasto público alto, déficit fiscal, deuda y emisión monetaria. El sistema del que la casta política se sirve para expropiar riqueza de los argentinos de bien y dárselos a sus clientes y amigos. En este sistema, lo que está en la base del deterioro es generalizado en los últimos 100 años, la construcción de una fachada, un negocio amparado en la mentira. Este es el lamentable estado material y espiritual de nuestra Nación", lanzó. 

"Hace muchos años que denunciamos este modelo ante la sociedad. Y hace poco más de tres meses, después de 100 años de paulatina decadencia y más de una década de caída libre a la miseria, una mayoría silenciosa levantó la voz. Esa mayoría silenciosa que se compone de los que trabajan, de los que producen, de los peones rurales que se levantan a las cuatro de la mañana, del que atiende un negocio, del cuentapropista, del trabajador informal, del joven que no encuentra trabajo y de las amas de casas que tienen la enorme tarea de educar a nuestras generaciones futuras", prosiguió Milei.

Y señaló que "una mayoría silenciosa" de aquellos ciudadanos argentinos desprotegidos, que "no los invitaron a sentarse en la mesa del poder, en la que siempre se definió el rumbo del país". "Esa Argentina despertó, asistió a las urnas y puso en la Presidencia a un hombre recién llegado a la vida política, que conduce una fuerza política nueva, que puede no tener mayorías parlamentarias, ni intendentes, ni gobernadores, pero que sabe lo que tiene que hacer, sabe cómo hacerlo y tiene la convicción para hacerlo", remarcó.

"Un Presidente que puede no tener el poder de la política, pero que tiene el poder de la convicción y el apoyo de los millones de argentinos que quieren un cambio de verdad. Porque como dicen las sagradas escrituras en el libro de Macabeos y que se conmemora en la fiesta de Janucá: la victoria en la guerra no depende de la cantidad de soldados sino de las fuerzas que vienen del cielo", afirmó.

"Hace 35 años en su primer discurso acerca del estado de la Nación el Presidente Carlos Saúl Menem dijo que el coraje de un pueblo no se comprueba únicamente en el campo de batalla o al enfrentar desgracias sino que también se comprueba por la cantidad de verdades que es capaz de soportar", recordó.

"Él le hablaba al pueblo argentino en un contexto con algunas similitudes económicas al contexto actual, que lo instaban a tomar decisiones difíciles similares a las que me toca tomar a mí hoy. Durante la campaña electoral le hablamos al pueblo argentino con la verdad por primera vez en décadas y el pueblo lo comprendió, lo aceptó y nos eligió. A pesar de que había otros candidatos que prometían las mismas soluciones de siempre, repitiendo el mismo discurso conciliador y engañoso de siempre, por primera vez en mucho tiempo la sociedad eligió al candidato que prefería decir una verdad incómoda que una mentira confortable", relató.

"Nosotros le planteamos a la sociedad que la única forma de evitar una catástrofe económica peor sería con un ajuste del gasto público brutal y rápido. Le planteamos a la sociedad también que la corrección de los precios reprimidos y la inflación rezagada producto de la emisión monetaria generarían meses de inflación muy alta y también que sanear la economía destrozada que heredábamos implicaría sacrificio y dolor y tardaríamos en salir del pozo. Firmamos un contrato electoral de esfuerzo y sacrificio porque 100 años de decadencia no se dan vuelta de un día para el otro", aseguró.

"Pero al mismo tiempo, asumimos un compromiso con los argentinos de que el esfuerzo iba a valer la pena, porque hacerlo nos iba a permitir cumplir dos objetivos: primero nos permitiría terminar con la inflación para siempre y avanzar en las reformas estructurales para que la Argentina vuelva a ser un país próspero y pujante; segundo, nos permitiría terminar con el régimen de apartheid político que hay en la Argentina desde hace décadas. Un régimen en que los políticos y sus amigos son ciudadanos de primera y los argentinos de bien son ciudadanos de segunda", dijo.

"Por eso, por el mandato de cambio que nos dio la gente y con el aval de haber dicho la verdad y nada más que la verdad en campaña, durante nuestros primeros 82 días en funciones hemos llevado adelante el programa de gobierno más ambicioso del cual se tenga memoria. En el plano económico, comenzamos por destruir el huevo de la serpiente: el déficit fiscal", dijo.

Precisó "hemos avanzado en la reducción del gasto público más profunda de nuestra historia, haciendo un recorte de cinco puntos del PBI en tan solo un mes redujimos el gasto primario del Estado Nacional en 40% en términos reales, donde dicho resultado surgió de eliminar la obra pública, reducir el 98% de las transferencias a las provincias, reducir los ministerios a la mitad, echar empleados públicos fantasmas, eliminar planes sociales a personas que no lo necesitaban, terminar con los intermediarios de la pobreza y reducir al mínimo la flota de autos, asesores y teléfonos celulares. Es decir, si bien ha habido licuación, ha habido mucho más de motosierra, todo para la política".

"En definitiva es un ajuste que ha sido realizado mayormente sobre el sector público nacional y no como se hizo siempre aumentando impuestos y cargando todo el peso sobre el sector privado. Como ya no se habrán escuchado decir en los últimos 123 años la Argentina tuvo déficit fiscal en 112 de ellos", aseguró Milei. Según el Presidente el déficit fiscal y la lucha contra la alta presión fiscal "son para nosotros la madre de todas las batallas, son la causa de la pobreza y del estancamiento de los últimos 100 años".

"Luego de décadas de gobierno que despilfarraron el dinero de los pagadores de impuestos, la Argentina vuelve a contar con un gobierno que va a cuidar cada uno de los pesos que con trabajo y sudor los argentinos pagan. Segundo: evitamos el default con el FMI y otros organismos multilaterales en el que íbamos a caer a 11 días de haber asumido. Tercero: cortamos con la emisión monetaria que es la única y probada causa de la inflación. Y a través de un ambicioso programa financiero avanzamos con el saneamiento del balance del Banco Central", indicó.

Y agregó que "de hecho, desde que llegamos al gobierno hemos comprado en el mercado cerca de 9 mil millones de dólares, donde pese a esta emisión, la ejecución de puts contra el BCRA y el pago de intereses a los pasivos remunerados, la contracción por BOPREAL y por el ajuste fiscal, ha logrado mantener la base monetaria constante. Esto es, para la misma base monetaria en pesos, hoy tenemos 9.000 millones de reservas adicionales que cubren más del 90% de la misma. No solo eso, la base monetaria que durante el siglo XXI se ha ubicado en torno al 9% del PBI, hoy solo representa el 3%, mientras que si consideran la versión amplia algo sólo factible en una crisis de confianza furiosa, la misma está en línea con el promedio histórico".

Tras lo cual dijo que "por ello, en el último mes se ha desplomado el precio del dólar paralelo, la brecha con el dólar de importación corregido por impuesto País ha desaparecido y los futuros del dólar se han alineado con las pautas establecidas por el BCRA, en un contexto en el cual el precio de los bonos sube, el riesgo país baja y las acciones vuelan por las nubes, pese a los intentos de algunos degenerados Fiscales por sabotear el futuro de los argentinos de bien".